jueves, 25 de septiembre de 2008

ABORTO

Ahora que los partidos de izquierdas de nuestro país, antes llamado España, se están poniendo de acuerdo para dar una nueva vuelta de tuerca a la ley del aborto, ampliando los plazos hasta tal punto que prácticamente se deja al libre criterio de la madre el momento de abortar, ya saben aquello de “nosotras parimos, nosotras decidimos”, el famoso grito de guerra de las extremistas feministas de medio mundo. Ahora, como decía, es el momento de ir más allá en la reforma de dicha ley adaptándola a los nuevos tiempos y a la problemática actual en las relaciones madre hijo.

Para ello, yo propondría una ampliación de los plazos legales para abortar de hasta 489 meses, ¡que barbaridad! dirán ustedes con toda la razón del mundo. Pero cuando les explique mi propuesta verán como la encuentran más razonable:

Me refiero a esas criaturas que después de abandonar el vientre materno el día de su alumbramiento, continúan viviendo al amparo del útero de mama año tras año, década tras década, sin tener ni la más remota intención de abandonar esa protección que durante nueve meses les dio alimento y calor, y que en los sucesivos años, ya convertido en un útero más sofisticado, les sigue proporcionando alimento, calor, les lava la ropa, se la plancha, les hace la cama, la comida, y en la mayoría de los casos no les cobra por todo ello. Piénsenlo bien, ¿no sería digna de una película de Buñuel la siguiente escena?

-Mira Luisito, quería hablar contigo. Mañana cumplirás 39 años…
-No me digas más mama, me vas ha regalar la i-phone de Appel que me hace tanta ilusión, aprovechando que es día dos y que ya habrás cobrado tu pensión. –Interrumpió Luisito.
-No Luisito, es muy doloroso lo que te tengo que decir.
-Mama, me asustas ¿Qué pasa? ¿No has cobrado tú pensión?
-No, no es eso. Veras; como te decía mañana cumplirás 39 años, y he decidido acogerme a la ley de plazos para abortar antes de que cumplas los 40, en cuyo caso ya no podría ejercer mi derecho a decidir.
-Venga ya, mama, tú no puedes hacer eso, ¡soy tu hijo!
-Sí, si puedo, la ley me lo permite, y lo voy a hacer. Sabes que te vengo avisando desde hace tiempo que tenías que buscar trabajo de una vez, e irte a vivir solo, o casado, o juntado, como quisieses. Pero tú no me has tomado nunca en serio.
-Vale mama, ya me has acojonado bastante, pero deja ya de gastar ese tipo de bromas que me ponen los pelos de punta.
-No es ninguna broma, de hecho en la calle hay una ambulancia del Samur que viene a recogerte para llevarte a una clínica abortista estatal donde te aplicaran la inyección.
-No mama por favor, no me hagas esto, prometo buscar trabajo, novia, casarme, pero diles que se vayan –Gritaba con desesperación Luisito.
-Lo siento hijo, pero ya es tarde. –Con los ojos bañados en lágrimas, la madre se levanto de su silla, y con paso lento fue a abrir la puerta de la calle. En el corto trayecto que la separaba de la puerta un pensamiento le asaltó de repente; quizás debió de abortarlo dentro de los nueve meses de embarazo, él habría sufrido igual, pero al menos ella no le habría oído llorar.

¿Que les ha parecido? Una gran idea ¿no? Como verán el padre ni aparece, ni pinta nada, “nosotras parimos, nosotras decidimos” ya saben. El pequeño detalle de ponerle una inyección letal a Luisito, podría parecerse a una pena de muerte, pero para eso está la adecuada manipulación del lenguaje al que los partidos de izquierda son tan aficionados; esto sería un “aborto legal aplazado” lo mismo que el trasvase del Ebro a Barcelona es una “toma puntual de agua” o la crisis económica es un “periodo breve de desaceleración económica”.

lunes, 22 de septiembre de 2008

La Costa de los Diamantes - Clive Cussler


Diamantes y petróleo, dos recursos en los que África es rica y que, desgraciadamente, han causado en este continente más estragos que el hambre. Las gemas consiguen llevar al poder a terroristas que acaban convirtiéndose en dictadores a poco que les dejen, que solo buscan oprimir a sus compatriotas. El petróleo, sin embargo, es utilizado por los occidentales para enriquecerse, para tener el dominio del principal combustible que se utiliza en el paneta... pero que también puede ocasionar la mayor catástrofe ecológica que jamás haya vivido la Tierra. A bordo del Oregón, el barco de aspecto desastroso, pero con todos los adelantos y el armamento de ultima generación Juan Cabrillo y su equipo tratan de acabar con un grupo guerrillero por cuenta del gobierno congoleño; pero eso les llevará a enfrentarse con un eco terrorista que pretende concienciar al mundo del problema del deterioro del medio ambiente convirtiéndose en su más temible enemigo, al provocar espantosas catástrofes meteorológicas. Y mientras tanto se topan con noticias de un tesoro de valor incalculable que espera ser rescatado de las profundidades del mar y cuyo destino puede cambiar países enteros: demasiados frentes abiertos… y solo Cabrillo es capaz de afrontarlos.

Como casi todos los libros de Clussler, nos encontramos ante un libro de aventuras trepidantes y ameno de leer con referencias a sucesos ocurridos en la antigüedad histórica o mitológica, pero al fin y al cabo una novela de aventuras con buenos, malos ,la chica guapa y un popurri de acciones trepidantes.

A mi entender un buen libro para leer en esos momentos que necesitamos desconectar de todos los problemas que arrastramos al cabo del día. Os lo recomiendo.

Habeis leido algun otro libro de Clive Cussler, decirnos cual os ha gustado más.